Durante años los padres han seguido un claro mandato cultural: hay que contener las emociones negativas delante de los niños y mantener la compostura. Es necesario ocultar la tristeza o frustración y mostrar la mejor cara. Así, garantizan a sus hijos una infancia feliz y equilibrada. Sin embargo, según los últimos estudios psicológicos, podríamos equivocarnos […]