Disney ha sabido reflejar los entornos más variopintos para recrear maravillas en sus películas, obras que mezclan el arte, la arquitectura y la imaginación para ofrecernos lugares mágicos e inolvidables. Algunos lugares son fiel reflejo de la realidad, otros tan solo han servido de inspiración vaga, pero lo que está claro es que han sido sus fuentes reales y merece la pena echarles un vistazo para saber un poco más de la magia que nos cautivó de niños y no tan niños.