Actualizado el domingo, 7 marzo, 2021
El estudio realizado en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (CNIC) ha descubierto la proteína capaz de transformar la grasa «mala» en grasa «buena».
Se trata de la proteína MKK6, que se encarga de la transformación de la grasa blanca, acumuladora de lípidos, en grasa marrón que quema lípidos para poder mantener nuestra temperatura corporal. De esta forma, también reduce la obesidad. Aproximadamente 2.200 millones de personas sufren sobrepeso u obesidad en el mundo, un mal endémico que puede haber encontrado su cura.
El equipo, coordinado por la doctora Guadalupe Sabio, son optimistas con este descubrimiento, pero aún deben aclarar si al inhibir esta proteína los pacientes pueden sufrir efectos secundarios o daños en otros órganos vitales.
En el estudio han participado investigadores del Hospital Universitario de Salamanca, donde se analizaron las muestras de grasa de pacientes obesos; el resultado, la identificación de una proteína, la MKK6, que aparecía en mayor cantidad de lo habitual. Este resultado les llevó a centrarse en su uso, y es que es la encargada de reducir la transformación de la grasa blanca en grasa marrón, como explicábamos antes.
Los estudios centrados en el plano de la grasa acaparan la atención desde hace mucho tiempo. Es evidente el gran papel que juega la grasa en nuestro organismo, ya que es esencial para mantener el equilibrio energético y ayudar a regular la temperatura del cuerpo. Pero cuando hablamos de grasa tenemos que hacer dos distinciones, puesto que el metabolismo humano cuenta con dos tipos de tejido graso: un tejido adiposo blanco, encargado de almacenar las calorías extra, y el marrón, una grasa «buena» que se dedica a quemar energía para mantenernos la temperatura adecuadamente.
La grasa marrón suele activarse con el frío para generar calor en vez de almacenarse. Pero esta cualidad también puede desarrollarla la grasa blanca normal, transformándose en marrón para generar esta energía. De esta manera, podemos trabajar para eliminar el gran problema del sobrepeso actual, tan solo creando una activación en la grasa blanca. De hecho, el gran problema de las personas obesas es que pierden la capacidad de activar la grasa marrón para eliminar la grasa en forma de calor, y por lo tanto son incapaces de perder ese peso.
El estudio apunta a que esta incapacidad de transformar la grasa blanca en parda es culpa de la proteína llamada MKK6, muy presente en las personas obesas.
Las personas con obesidad pierden la capacidad de activar la grasa marrón para eliminarla en forma de calor y, por lo tanto, son incapaces de perder ese peso
En los experimentos con ratones del estudio, los que no tenían esta proteína poseían mayor cantidad de grasa marrón, por lo que se encontraban protegidos ante problemas como la obesidad al eliminar la energía sobrante en forma de calor. Además, en sus ensayos han podido demostrar que, eliminando esta proteína en los ratones, estos frenaban la obesidad y comenzaban a reducir su peso. También han podido comprobar que estos ratones se encontraban protegidos frente a la diabetes y al hígado graso.
Recordemos que esta no es una cura mágica contra la obesidad, ninguna pastilla podrá sustituir a una vida saludable. Pero puede ser una ayuda extra para todas aquellas personas que, a pesar de llevar una vida sana y hacer ejercicio, son incapaces de luchar contra la obesidad.
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