“El código postal es más importante que el código genético” Las ciudades más sanas de España

Actualizado el martes, 24 julio, 2018

Los expertos en salud pública advierten: «el código postal es más importante que el código genético”. O al menos, eso es lo que demuestra el mayor mapa de la mortalidad por cáncer realizado hasta la fecha en España. En este mapa vemos por colores la probabilidad de padecer un cáncer dependiendo de en qué región hayas nacido. Las manchas rojas son zonas en las que los riesgos de morir por un tumor concreto con una probabilidad de más de un 50% más alta que en el resto del país.

El atlas está elaborado por investigadores del Centro Nacional de Epidemiología y utiliza datos de un millón de muertes por cáncer registradas en España entre 1989 y 2008. Estos mapas muestran riesgos relativos, no absolutos pero son bastante significativos. En ellos encontramos áreas de Castilla y León, como Burgos y Palencia donde es más alta la probabilidad de morir de cáncer de estómago debido a las costumbres alimentarias en estas zonas de España, donde suelen consumirse más alimentos curados o ahumados y menos frutas y vegetales que en las zonas costeras.

Los fallecimientos por cáncer de pulmón se localizan en mayor número en Extremadura y la zona occidental de Andalucía (Huelva, Sevilla y Cádiz), además de en Asturias y Cantabria. Las principales razones sería una mayor contaminación atmosférica en estas zonas pero también un mayor consumo de tabaco pues en el mapa de observa una gran diferencia entre la mortalidad en hombres y en mujeres.

«Sevilla, Cádiz, Huelva… el «Triángulo del Cáncer» en España. Las más altas cifras de cáncer de pulmón, de mama y de vejiga». 20% más de muertes por cáncer que la media estatal. La Contaminación por metales pesados, principal factor»

El cáncer de próstata muestra una ligera desigualdad entre norte y sur, con una mayor tasa en Andalucía, aunque la evolución es a la baja en todas las regiones, según reflejan los mapas. Más llamativo resulta el atlas sobre el cáncer de vejiga, focalizado en Castilla y León y especialmente en la zona occidental de Andalucía entre 1989 y 1994, aunque después su incidencia disminuyó durante la siguiente década pero volvió a repuntar a partir de 2004, principalmente en zonas del noreste peninsular.

Especialmente significativo es el caso del  cáncer de mama, el atlas constata que, si en la década de los 90 había más casos en Cataluña y en Baleares (posiblemente por la industralización), ahora ese riesgo se ha trasladado a zonas de Andalucía occidental donde se han trasladado también ciertas industrias.

“Estos datos nos recuerdan que necesitamos políticas mucho más vigorosas y que la sociedad debería exigirlas. Estos mapas dejan claro que el cáncer no es una lotería. Los ciudadanos deberíamos votar pensando en el radón, en las industrias contaminantes, en las emisiones de los coches”. Miquel Porta, epidemiólogo.