Actualizado el jueves, 15 abril, 2021
El cuadro suele ser siempre el mismo: das vueltas entre las sábanas y, sin importar cuánto te esfuerces por dormir, tus ojos se resisten a cerrarse. Entonces tu mente se desboca y empiezas a pensar en todo lo que has hecho durante la jornada o en todo lo que tendrás que hacer al día siguiente. El insomnio ha llamado a tu puerta, pero no estás solo, el 35% de los habitantes del planeta también tienen ese problema.
Lo peor de todo es que cuando el insomnio persiste no solo afecta tu concentración y provoca somnolencia e irritabilidad sino que puede causar daños a nivel cerebral. De hecho, un estudio publicado en la revista Radiology ha desvelado que el insomnio crónico provoca anomalías en la sustancia blanca, el tejido que facilita la comunicación entre las diferentes zonas del cerebro e interviene en el aprendizaje.
Por suerte, existe un truco muy sencillo para conciliar el sueño: dormir con una manta pesada.
Los increíbles efectos de la presión profunda
La idea de usar una manta como remedio para el insomnio sienta sus bases en la terapia de presión profunda, la cual se ha utilizado con excelentes resultados en los niños que sufren un trastorno del espectro autista. De hecho, estos niños a menudo experimentan una sobrecarga sensorial provocada por sus dificultades para filtrar la información proveniente del medio. Como resultado, se muestran inquietos y ansiosos, un estado similar al que experimentamos cuando no logramos conciliar el sueño. La terapia de presión profunda les ayuda a recobrar la calma.
Esta terapia consiste en estimular a través del tacto diferentes puntos en el cuerpo, para generar un estado de tranquilidad y relajación. De hecho, se ha apreciado que este tipo de presión estimula la actividad del sistema parasimpático y disminuye la actividad del sistema simpático. Como resultado, se alivia la ansiedad, baja la presión arterial y el ritmo cardíaco vuelve a la normalidad.
La terapia de presión profunda también estimula la liberación de serotonina, un neurotransmisor responsable de regular diferentes funciones en el organismo, entre ellas el estado de ánimo, además de generar una agradable sensación de bienestar.
En España el consumo de somníferos se ha duplicado en la última década. Sin embargo, un estudio publicado en la British Medical Journal llevado a cabo en 10.500 personas desveló que quienes consumen estos medicamentos con regularidad tienen cuatro veces más probabilidades de morir de forma prematura, en comparación con las personas que usan métodos naturales para combatir el insomnio.
Una manta pesada puede ser la solución
Una manta pesada puede tener el mismo efecto sobre nuestro organismo que la terapia de presión profunda, por lo que no solo nos permitiría conciliar el sueño más rápido sino también liberarnos de la ansiedad.
Un estudio llevado a cabo en la Universidad de Massachusetts con 32 personas que durmieron usando mantas pesadas desveló que el 63% de los participantes reportaba una disminución de la ansiedad y el 33% mostró una disminución de la actividad electrodermal, un índice que refleja la actividad del sistema nervioso simpático y que expresa el nivel de activación de la persona.
Otro estudio realizado en la Universidad de Sídney confirmó estos resultados, concluyendo que las mantas pesadas son una estrategia eficaz para aliviar la ansiedad y el estrés incluso en las personas que sufren trastornos psiquiátricos.
¿Cuál es el secreto de la manta?
Los neurocientíficos afirman que el contacto con las sábanas ligeras podría provocar una reacción de alerta a nivel de sistema nervioso central. Al contrario, una manta pesada estimularía los receptores del tacto en el cuerpo, provocando una sensación de seguridad y relajación que incita al sueño.
Obviamente, usar una manta pesada no es un remedio mágico para el insomnio y la ansiedad pero combinado con otras técnicas naturales puede ser una solución muy eficaz. No obstante, se debe aclarar que las personas que sufran enfermedades respiratorias o de la circulación deben consultar a su médico antes de poner en práctica este consejo.