Actualizado el domingo, 24 octubre, 2021

Como buena fan de los zumos verdes he seguido investigando sobre tendencias similares o complementarias que no sólo me están ayudando a mantener mi peso sino estar llena de energía.

En la búsqueda me topé con varios libros como «El Intestino Feliz» pero el que más me impactó fue un libro muy práctico que lazaron Laura Prepon y Elizabeth Troy: «The Stash Plan». Esta guía me dio una nueva visión sobre la alimentación muy enfocada a la salud y no tanto al tema del peso como estamos acostumbrados a leer en la mayoría de publicaciones.

The Stash Plan

La base de esta guía son los caldos con huesos, aun que aquí aún no ha llegado, esta nueva tendencia esta siendo un éxito en ciudades donde su alimentación tradicional desconocía las virtudes de este alimento.

A pesar de ser un viejo conocido de nuestra gastronomía, este nuevo elixir de salud que ha puesto de moda la «Dieta Paleolítica«. Esta dieta no deja de ganar adeptos como el chef sudamericano Marco Canora, quién a día de hoyestá haciendo su agosto vendiendo su caldo de huesos a los neoyorquinos, que hacen largas colas delante de su restaurante Brodo para conseguir una taza.

En mi caso, sobre todo con la llegada del frío el cuerpo he dejado de lado mis zumos detox para regresar a mis caldos. Sientan de maravilla a mi intestino, alivia mis resfriados y cuida mis articulaciones y mi piel.

Como ya sabemos nuestra dieta está sobrecargada de aditivos químicos y otras sustancias, ya que nuestras prácticas agrícolas son bastante nocivas. Así que, lo que nuestro cuerpo necesita es una fuente de micro nutrientes que podemos encontrar en alimentos no elaborados.

Desde nuestros primeros días, los seres humanos hemos bebido caldo, el primero eran piedras hervidas del cual extrajimos su contenido mineral. Después durante la prehistoria, con la mejora de la caza, comenzamos a utilizar el tuétano de los animales como base principal del caldo. Esto supuso un avance en nuestra evolución, ya que el consumo de dicho caldo ayudó a le desarrollo del cerebro y el fortalecimiento de su sistema inmunológico.

Posteriormente civilizaciones como los griegos y romanos describían como sus soldados comían tuétano antes de salir a conquistar a el enemigo. Casi todas las culturas han tenido el caldo como base de su alimentación y esta demostrado que en los países donde se consume regularmente, la gente tiende a tener muchos menos problemas de salud.

Partimos de la base que la elaboración de este caldo debe ser casera y con componentes orgánicos, todo lo que venga envasado o dentro de un sobre no entra dentro de los mínimos para la realización del caldo. Pregúntate ¿cuantas sustancias químicas le han añadido a esa sopa de sobre? ¿qué cantidad de sal lleva? ¿cuantos de sus ingredientes eres capaz de pronunciar?

Este caldo no es sólo para saciar el hambre. Te dará una nueva vitalidad que puede haber estado perdiendo, alimentará su sangre, que a su vez alimenta tus órganos. No esperes a que llegue el invierno y estés resfriado para tomarte una buena taza caliente de sopa, intégralo en tu vida para no enfermar tan a menudo.

Aquí va mi receta preferida pero hay muchas más. Puedes prepararlo en una olla grande con agua, huesos de vacuno (rodilla, cañada…),  ave o pescado. Le añades verduras (zanahorias, apio, cebolla, ajo, jengibre…), y hierbas aromáticas (romero y tomillo para la carne y laurel, tomillo y albahaca para el pesacado), pimienta y sal. La clave es dejar que hierva suavemente y sin prisas (12 – 15h), para que los huesos liberen el colágeno, la queratina, la glucosamina y la condroitina que contienen, todos ellos difíciles de conseguir y maravillosos para tus huesos, cartílagos, intestino, piel, uñas, cabello y hasta para la memoria y para conciliar el sueño.

Muy importante antes de consumirlos enfriarlos y quitarles la capa de grasa que se crea en la superficie. En este video podéis ver como se realiza:

¿Y qué hay del efecto detox?, te estarás preguntando. Pues mira por dónde, la capacidad “detox” del hígado está relacionada con la cantidad de glicina disponible en el organismo ¿Y cuál es el alimento más rico en glicina? ¡Lo has adivinado: son los huesos y, en concreto, la gelatina del caldo con huesos!

Esperamos que el post os haya gustado, si conocéis otras recetas compartirlas con nosotros.

Recetas de los dos caldos Stash Plan más recomendados por nuestra comunidad (vegano y no vegano)

¿Vegano o no Vegano?

Dos recetas esenciales para que puedas elegir la mejor para ti

Si eres fan de los licuados energizantes tienes que conocer la nueva moda para superar este frío invierno. Se trata de recetas de caldo  para superar los días más fríos recuperando la energía y vitalidad que hay en tu interior.

¿Por qué sumarse a la nueva moda de los caldos?

Con la llegada del invierno nuestro cuerpo nos pide aumentar la ingesta de comida y bebida caliente. Es común que no nos apetezca un zumo mañanero, por lo que una buena solución podría ser una buena taza de caldo. En España aún no ha llegado, pero en ciudades como Nueva York, es común ver largas colas delante de restaurantes como El Brodo para conseguir una taza.

A pesar de ser un viejo conocido de nuestra gastronomía, este nuevo elixir de salud se ha puesto de moda a través de la “Dieta Paleolítica“. Ya sabemos que nuestra dieta está sobrecargada de aditivos químicos y otras sustancias, ya que nuestras prácticas agrícolas son bastante nocivas. Así que, lo que nuestro cuerpo necesita es una fuente de micro nutrientes que bien podemos aportarle con una buena taza de caldo.

Desde nuestros primeros días, los seres humanos hemos bebido caldo, el primero eran piedras hervidas del cual extrajimos su contenido mineral. Después durante la prehistoria, con la mejora de la caza, comenzamos a utilizar el tuétano de los animales como base principal del caldo. Esto supuso un avance en nuestra evolución, ya que el consumo de dicho caldo ayudó a le desarrollo del cerebro y el fortalecimiento de su sistema inmunológico.

Posteriormente civilizaciones como los griegos y romanos describían como sus soldados comían tuétano antes de salir a conquistar a el enemigo. Casi todas las culturas han tenido el caldo como base de su alimentación y esta demostrado que en los países donde se consume regularmente, la gente tiende a tener muchos menos problemas de salud.

Si incorporas estos caldos a tu dieta te darán una nueva vitalidad que puedes haber estado perdiendo, alimentarán su sangre, a la vez que alimentas tus órganos. No esperes a que llegue el invierno y estés resfriado para tomarte una buena taza caliente de sopa, intégralo en tu vida para no enfermar tan a menudo.

Receta de caldo vegano

Esta es una alternativa vegetal y fácil a los caldos de hueso de carne y pescado. No existe una receta fija, se puede añadir literalmente cualquier tipo de verduras que os guste. Estos son nuestros ingredientes.

>> Receta de caldo vegano ecológico

INGREDIENTES RECOMENDADOS

• 2 o 3 zanahorias grandes
• 2 tallos de apio (grandes)
• 1 cebolla grande
• 2 tomates grandes
• 1 trozo de jengibre
• 1 cabeza de ajo
• 500gm de setas shiitake
• 1 o 2 chirivías o zanahorias blancas
• 1 o 2 nabos
• 1 bulbo de hinojo
• 2 ramas de romero fresca
• 2 ramos de tomillo fresco
• 2 hojas de laurel
• 1 cucharada de sal en escamas
• 1 cucharada de pimienta negra en grano

Consejos para mejorar la receta:

Paso 1:

Llenamos la olla de agua filtrada y echamos las zanahorias, apio, tomate, chirivías, hinojo, nabo, jengibre previamente lavados pelados y cortados en trozos grandes.  Ac continuación quita la primera capa a la cebolla y córtala en dos o cuatro trozos. La cabeza de ajo pártela en sentido horizontal y junto a la cebolla viértelo en la olla. Añade también las setas previamente lavadas.  Para terminar comprueba que las verduras quedan sumergidas en el agua o añada más de esta, espolvoree la pimienta, la sal y las hierbas.

Paso 2:

Ajusta de nuevo el fuego, cubra la olla y déjelo a cocción lenta entre 6 – 12h.

Paso 3:

Cuando el caldo esté terminado, deja que se enfríe y viértalo pasando por un colador a un recipiente grande (vidrio preferiblemente). Después refrigerar en la nevera y ya estará listo para tomar este caldo cargado de micro nutrientes.

Una vez acabado todo este proceso, las verduras quedan muy desechas, pero podemos reutilizarlas triturándolas y haciendo unas deliciosas albóndigas veganas.

Receta de caldo de huesos orgánicos

Este podría parecer el caldo clásico de ternera, pero no lo es. La clave de esta receta es dejar que hierva suavemente y sin prisas (12 – 15h), para que los huesos liberen el colágeno, la queratina, la glucosamina y la condroitina que contienen, todos ellos son difíciles de conseguir y maravillosos para tus huesos, cartílagos, intestino, piel, uñas, cabello y hasta para la memoria y para conciliar el sueño.

>> Receta completa paso a paso de caldo ecológico de huesos orgánicos

INGREDIENTES RECOMENDADOS

• 1kg de huesos de ternera (tuétano), cadera, costillas… de origen ecológico.
• 3 zanahorias grandes
• 2 tallos de apio (grandes)
• 1 cebolla grande
• 1 cabeza de ajos
• 1 trozo de jengibre fesco
• 2 ramas de romero fresco
• 2 ramos de tomillo fresco
• 1 cucharada de sal en escamas
• 1 cucharada de pimienta negra en grano

Consejos para mejorar la receta:

Paso 1:

Colocar los huesos en una olla grande llena de agua filtrada a cocción lenta. Posteriormente enjuague las zanahorias, apio, ajo , jengibre y hierbas. Pela las zanahorias y córtalas en trozos grandes junto con el apio y el jengibre. Añádalo a la cocción. A continuación quita la primera capa a la cebolla y córtala en dos o cuatro trozos. La cabeza de ajo pártela en sentido horizontal y junto a la cebolla viértelo en la olla. Para terminar comprueba que las verduras quedan sumergidas en el agua o añada más de esta, y espolvoree la pimienta, sal y las hierbas.

Paso 2:

Ajusta de nuevo el fuego, cubra la olla y déjelo a cocción lenta entre 12 – 15h.

Paso 3:

Cuando el caldo esté terminado, deja que se enfríe y viértalo pasando por un colador a um recipiente grande (vidrio preferiblemente). Después refrigerar en la nevera. Se dará cuenta que está listo, cuando vea una capa densa que se acumula en la superficie, esto es la grasa del contenido de colágeno de los huesos, retírela facilmente y su caldo, lleno de micro nutrientes, estará listo para tomar.

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