Actualizado el lunes, 18 enero, 2021
Asociamos el término dedemencia con las personas mayores, con esos momentos en los que comienzan a deteriorarse diferentes capacidades cognitivas en edades avanzadas. Sin embargo, la demencia digital no está relacionada con la edad, pero sí con la misma pérdida de cualidades. Se trata de un empeoramiento de diferentes funciones cognitivas por el abuso de las nuevas tecnologías.
Este término lo acuñó el psiquiatra Spitzer, pero claro: hablar de este problema hace 20 años y pronosticar que las nuevas tecnologías de la información influirían negativamente en la población era algo inconcebible. Sin embargo, a día de hoy es una realidad. Sobre todo en las generaciones más jóvenes: la población con más riesgo.
¿Qué es la demencia digital?
Falta de concentración, problemas de memoria a corto plazo, incluso complicaciones en el proceso de razonamiento lógico y crítica, son algunos de los problemas más comunes que nos encontramos. El hecho de que tengamos acceso con tanta inmediatez a cualquier tipo de información o reforzamiento, está haciendo mella en las capacidades no solo cognitivas y de pensamiento, sino también de disfrute de la vida cotidiana.
Estas son las 5 claves para prevenir la demencia digital
1. Establecer horarios
Una forma de tomar un poco de distancia con esta dependencia a lo digital es establecer horarios para el uso de estos terminales o, incluso, establecer un tiempo de duración en la cual estamos expuestos. Obviamente, este se tiene que ajustar a tus necesidades en el día.
¿No te ha pasado que pretendes tener una sesión intensa de estudio, pero cuando te has dado cuenta has perdido la primera media hora viendo vídeos en Youtube, navegando por Facebook o actualizando Instagram?
Pues a esto me refiero: establece un horario con el que no te niegues la presencia en internet, pero sin el que sea tan arbitraria.
2. Encontrar pasatiempos sustitutivos
A veces, cuando llegamos del trabajo o de la universidad, no tenemos ganas de nada más que evadirnos con nuestros aparatos electrónicos. Para muchas familias esto se ha convertido en una rutina. No es muy descabellado ver reuniones familiares donde cada uno está con su propio móvil o tablet, mientras la televisión se queda encendida como sonido de fondo.
Establece planes alternativos. Una tarde así podría aprovecharse para pasarla en familia jugando a juegos de mesa o reuniéndote con amigos para poneros al día. La tecnología podrá estar presente en nuestra casa, pero no tenemos por qué usarla siempre como proveedora de entretenimiento.
3. Haz planes fuera de casa
Muy en la dinámica del consejo anterior, aunque esta vez haremos hincapié en el ejercicio físico al aire libre.
El deporte es una fuente de beneficios muy subestimada, pero el tiempo que estás haciendo deporte, estás ejercitando tu cuerpo, saneando tu mente y produciendo endorfinas que te harán sentir mejor. Sobre todo si aprovechas el tiempo con deportes de equipo con tus amigos.
4. Oblígate a pensar
«¡Ya lo tengo! Seguramente, se referirá a ejercitar la mente con aplicaciones tipo Brain Training«. Pues la verdad es que no exactamente. Se ha comprobado que la práctica con ese tipo de aplicaciones digitales puede aumentar tu desempeño en las tareas de la aplicación, pero tienen poco o nulo efecto en tu día a día. Vamos, que no te harás más inteligente con una aplicación de móvil.
Oblígate a pensar. Haz con puzzles. Desafía a un amigo a un juego de estrategia. Escribe para reorganizar tus ideas. Crea algo con tus manos… Cualquier estrategia creativa es buena siempre y cuando te obligue a usar la imaginación.
5. Cambia las series por los libros
Ver series y películas puede ser un pasatiempo muy apasionante, pero como queremos enfocarlo en este artículo, su consumo comedido es agradable. El problema está en los abusos. Y hay quien ha sustituido prácticamente todos sus pasatiempos y se ha volcado de lleno en NetFlix.
No está mal cambiar de vez en cuando la narrativa de una serie a la de un libro. Te ayudará a centrar tu atención y estimulará tu imaginación, otro factor que se ve muy perjudicado por el abuso de las tecnologías digitales.
Cambia algunos hábitos y lucha contra la demencia digital
Como siempre, un uso responsable de cualquier tecnología es siempre interesante, incluso divertido. El problema está cuando sustituimos antiguos hábitos y costumbres para dedicarnos casi exclusivamente a los medios digitales.
Al final, prevenir la demencia digital se basa en mejorar nuestros hábitos de ocio para asegurarnos que nuestro cerebro siga rindiendo al 100% en todas las áreas y contextos.
¡No te dejes consumir por la tecnología!