Actualizado el Sunday, 1 August, 2021
Cierra los ojos por un momento. Trata de imaginar una playa. Sencillo, ¿verdad? La mayoría de nosotros habremos visto una playa en algún momento de nuestra vida. Aunque hay personas que quizás no hayan tenido la oportunidad de ver una playa en directo, seguro que la han visto en fotografías, libros, la televisión, el cine o incluso en Internet. Así que no nos resultará difícil imaginar una. De hecho la imaginaremos de un modo u otro en función de nuestra experiencia e imaginación. Pero, no para todo el mundo este simple ejercicio resulta algo sencillo. En el año 2005 científicos descubrieron algo inimaginable: existen personas que no tienen la capacidad de imaginar. A esta condición se le llama afantasía.
Afantasía
Afantasía es una condición (aphantasia, en inglés, el nombre que recibió por primera vez) la cual hace que las personas que la desarrollan no puedan visualizar imágenes mentales.
“Imagination”, por David Werner (vía Flickr)
De pequeños todos hemos tenido dificultades para dormir en algún momento. Alguna vez nuestros padres puede que nos hayan venido con el tópico de contar ovejitas.
“Cuando no podía dormir, mi padrastro me decía que contara ovejitas. Me explicó de que se trataba ese ejercicio para conciliar el sueño, intenté, pero nunca pude lograrlo”, cuenta.
Eso es precisamente lo que cuenta Niel Kenmuir, de Lancaster (Inglaterra), quien siempre ha tenido una mente ciega, según cuenta a la BBC. Probablemente si Niel hubiera sido de Gales no habría tenido esta dificultad, pues allí hay montones de ovejas. ¿O sí?
Blake Ross, co-creador de Mozilla -junto con David Hyatt- y director de producto en Facebook hasta el año 2013, descubrió este año 2016 que sufría de afantasía. El 22 de abril de 2016 escribió un artículo en Facebook que viralizó como la pólvora. La revista Playground se hace eco del mismo:
“Si me pides que imagine una playa, le daré vueltas al concepto de playa. Sé que hay arena, que hay agua, sol y, tal vez, un socorrista. Sé datos relacionados con las playas pero no soy capaz de rememorar una que haya visitado porque no guardo ninguna experiencia sensorial relacionada con ellas, ya sea visual, auditiva, emocional o de cualquier otro tipo. No tengo la capacidad de crear una imagen de una playa ni cerrando los ojos, ni leyendo un libro, ni concentrándome con fuerza durante horas. Ni siquiera si estoy en frente de una playa”.
Lo curioso es que Blake nació en Miami, una ciudad rodeada de playas. Las personas que sufren de afantasía no pueden recordar ninguna experiencia que provenga de los sentidos a no ser que la esté sintiéndolo en ese mismo momento.
El polo opuesto de afantasía es la hiperfantasía, las personas que poseen la condición tienen imágenes visuales desbordantes. Foto: Mari Paz Molina (CC vía Flickr)
¿Qué consecuencias tiene la afantasía en la vida cotidiana? Una de las cosas habituales que les sucede a las personas que sufren esta condición es que le cuesta reconocer rostros. Aun así, la mayoría de personas que tienen afantasía no la perciben como una incapacidad. Sólo una manera diferente de experimentar la vida.
Así pues, el tener ceguera imaginativa no significa incapacidad para la creatividad, o al menos para hacer cosas que la requieren. El propio Blake, cuando dejó de trabajar en Facebook se dedicó a escribir guiones de series (incluso una para la cadena HBO). Blake comenta que puede crear historias desde la nada juntando palabras que formen conceptos. La única diferencia es que, dichos conceptos, no se reproducen en su cabeza como si se tratara de una foto o de un vídeo.
Así pues, ¿eres capaz de imaginar una playa?
Si te gustó esta historia no te pierdas esto: