Actualizado el viernes, 2 septiembre, 2016
No, no te has vuelto daltónico, ¡es un bogavante azul!. Wayne Nickerson, este pescador de Massachusetts con tanta suerte, es el que se lo ha encontrado en sus redes, tras 35 años en la profesión.
Solo 1 de cada 2 millones de ejemplares son azules y se debe a una anomalía genética.
Los bogavantes pueden encontrarse en el este del Océano Atlántico, en el noroeste del Mar Negro y en partes del Mar Mediterráneo. Habita en refugios rocosos y tiene 10 patas, situadas en el tórax. Se alimenta de gusanos, bivalvos y peces muertos, que pesca generalmente durante la noche.
En concreto, estos rarísimos ejemplares azul eléctrico son así, porque tienen un exceso de crustocianina, una proteína con la que consiguen ese color. ¿El problema? No pueden camuflarse en el fondo marino tan bien como suelen hacerlo los bogavantes con su tradicional color marrón verdoso. Y son un blanco más fácil para las redes, sociales o de pescadores.
A pesar de que este tipo de bogavantes son muy raros de encontrar, pueden fácilmente darse en condiciones de cautividad, según el tipo de alimentación que se les dé.
¡Pero no es el bogavante más raro que existe! Si te ha impresionado este fabuloso bogavante azul, mira estos dos: el naranja y el albino. Del primero, podemos encontrar 1 entre 10 millones y, del segundo, 1 entre 100 millones.
Y si de crustáceos va la cosa, algunas especies de cangrejo (Callinectes sapidus) y de cangrejo de río (cherax destructor o el cherax quadricarinatus) también pueden tener un color azulado como ves en esta fotografía.
Fuente: La vanguardia
Lo que está claro es que la naturaleza siempre es bella, sea del color que sea.
«El arte, la gloria, la libertad se marchitan, pero la naturaleza siempre permanece bella», – Lord Byron (poeta británico)