Esta conmovedora historia empieza con un niño que intenta robar unas medicinas para su madre. Te sorprenderá como termina la historia.
A veces no somos conscientes de lo que puede cambiar una vida con un simple gesto y mucho menos que este sea devuelto multiplicado con los años.
«Yo creo en un mundo mejor» debería transformarse en:
«Yo creoenun mundo mejor»
Cuando das algo sin esperar nada a cambio siempre se devuelve de alguna forma, ya sea la satisfacción, devolución o simplemente saber que estás haciendo que todo sea un poco mejor.
De nuevo, una historia que merece ser compartida.
¿Qué te ha parecido?
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.