Actualizado el Tuesday, 14 December, 2021
Todos recordamos lo complicado que era poder aprenderse la tabla periódica de los elementos, esa disposición de los elementos químicos en forma de tabla, ordenados por su número atómico (número de protones), por su configuración de electrones y propiedades químicas que no entendíamos muy bien para qué servía pero que debíamos memorizar.
Pero es más importante de lo que imaginamos. En palabras de Theodor Benfey, la tabla y la ley periódica «son el corazón de la química y es comparables a lo que la teoría de la evolución representa para biología y las leyes de la termodinámica en la física clásica».
Sin embargo, al mirarla no suele resultar bastante abstracta y distante del mundo que conocemos. Nos cuesta mucho visualizar que hay detrás de esas letras y símbolos. Para solucionarlo, Keith Enevoldsen ha creado esta tabla periódica de los elementos que tiene una peculiaridad que la hace muy especial: está creada con dibujos de objetos cotidianos y la explicación de para qué se usa cada uno de los elementos químicos que conocemos.
En ella podemos reconocer desde el litio de las baterías al helio de los globos o el xenón de las lámparas de alta intensidad.
LA TABLA PERFECTA PARA EDUCAR EN QUÍMICA
Sí, ya lo sabemos, en esta imagen todo se ve muy pequeño por lo que te recomendamos consultarlo en la página original. La iniciativa es genial, una forma de acercarte a la química de la mano de un contenido más intuitivo, fácil de entender y autoexplicativo. Esta tabla periódica pictórica es colorida, divertida y llena de información. Además del nombre, símbolo y número atómico del elemento, cada cuadro de elemento tiene un dibujo de uno de los principales usos cotidianos en nuestra vida y del elemento o de los procesos naturales.
La tabla también está codificada por colores para mostrar los grupos químicos. Unos símbolos pequeños contienen información adicional sobre el estado del elemento (sólido, líquido, gas), color del elemento. Y otro símbolo nos indica dónde lo encontramos: cuerpo humano, común en la corteza terrestre, metales magnéticos, metales nobles, radioactivos y raros o nunca encontrados en la naturaleza. Sin duda esta tabla tan divertida merece ser impresa a tamaño gigante para colgarla en la clase o en la habitación de su cuarto. Y tú, ¿qué opinas de esta iniciativa?
Una iniciativa muy necesaria para acercar la química a los niños desde un punto de vista más práctico.