Actualizado el domingo, 8 mayo, 2022
Debemos considerar como parte de nuestra historia, especialmente la masculina, la respuesta que las distintas sociedades han dado a la calvicie y las soluciones que le han intentado ofrecer a este problema estético, desde los tradicionales ungüentos o pelucas, a las innovadoras soluciones de injertos o prótesis capilares. Como curiosidad, puede que la calvicie exista desde tiempos muy remotos pero la palabra alopecia fue acuñada muchos siglos más tarde. Le debemos su origen al dermatólogo francés Sabouraud (1864-1938). Toma como inspiración a la palabra “alopex”, que significa zorro en griego. Pero, ¿qué tiene que ver un zorro con la alopecia? Este dermatólogo francés se inspiró en este popular mamífero debido a que ellos cambian de pelo en cada estación. Por tanto, debemos recordar que se considera alopecia a la pérdida anormal del cabello y aunque el término se considera un sinónimo de calvicie, no es lo mismo. Alopecia hace referencia a la caída de pelo patológica, mientras que calvicie se refiere a la alopecia androgenética del hombre o de patrón femenino en la mujer.
Cómo combatían la calvicie en la antigüedad
Contamos con grandes personajes históricos que se han preocupado por conservar su pelo, desde los faraones egipcios hasta los filósofos griegos. El emperador Julio César disimulaba su calvicie entre sus coronas de laurel mientras intentaba ponerle freno usando un antiguo tratamiento a base de grasa de oso, de ciervo y diente de caballo. Hipócrates también estudió la calvicie para encontrar cómo prevenirla o corregirla. Su más famosa receta fue una mezcla de opio, rábano picante, excrementos de paloma, remolacha y varias especias que se aplicaban sobre el cuero cabelludo. Sin embargo, obtuvo tan poco éxito que las mayores calvicies han pasado a ser denominadas como calvicies hipocráticas. Lástima que el pobre Hipócrates no conociera las actuales ventajas del injerto o las prótesis capilares. Además de aquel ungüento, también descubrió que los eunucos de la armada persa nunca se quedaban calvos. Es decir, que la castración poco antes o poco después de la pubertad prevenía la calvicie. Sin embargo, aunque ese remedio sí ha sido demostrado con el tiempo, no ha sido muy popular debido a que ante dicha propuesta, la calvicie no parece tan mala opción.
Lo que sí se empezó a popularizar siglos más tarde es el uso de pelucas y peluquines. Sin embargo, esta era una práctica estética solo al alcance de la realeza, los aristócratas y los burgueses. Por supuesto, el uso de estas pelucas, al igual que el de los peinados, dependía de las modas del momento ya que por ejemplo, durante parte de la Edad Media se pusieron de moda las frentes anchas. Ahora nos parecería una moda horrible pero llegó a ser tan popular que hombres y mujeres se afeitaban la primera línea de la cabeza para parecer que la tenían más ancha.
La evolución de tratamientos y la llegada de las prótesis capilares
De los tradicionales remedios a base de pelucas se ha pasado a tratamientos más sofisticados y de aspecto mucho más natural. De hecho, se siguen usando pelucas pero las prótesis capilares son las que más han crecido en variedad y popularidad debido a las alternativas que ofrecen.
¿Qué ofrece de innovador una prótesis capilar frente a las tradicionales pelucas? Casi todo. Se trata de una base muy fina en forma de malla a la que están unidas fibras de cabello natural (aunque también existen sintéticas) que busca un acabado muy natural y casi imperceptible.
Para que queden completamente adheridas al cuero cabelludo se aplican una serie de pegamentos o clips especiales. Normalmente, las prótesis capilares son parciales y se aplican tan solo a una zona determinada de la cabeza pero también existen totales. Esta malla imita a la perfección el cuero cabelludo y es irreconocible en su uso. Pero eso sí, deben ser prótesis de calidad y colocadas y mantenidas por profesionales del sector.
Como véis, mucho han cambiado las cosas desde la época de Hipócrates y por suerte, ahora cada día es más fácil y económico, para hombres y mujeres, disimular estéticamente tu calvicie con resultados realmente sorprendentes por su calidad de acabado y por su naturalidad.