Actualizado el lunes, 17 octubre, 2022
Aunque la pasión por fotografiar gatitos es propia de nuestra época, sin la pasión histórica por contar y representar historias en movimiento, el cine no hubiera existido.
Desde las cavernas, en que la Humanidad dejó plasmados sus dibujos, las sombras chinescas, entre luces de antorchas y sombras, el mito de la caverna de Platón, dejaría de existir, enseñar, divertir y entretener mediante imágenes fue el objetivo de miles de personas, de eruditos e inventores, de actores y saltimbanquis, de fabricantes de juguetes y de comerciantes.
Hace ya unos largos 2.400 años, Platón, uno de los grandes filósofos de la historia de la humanidad, escribió en su libro “La República” lo que conocemos como “EL MITO DE LA CAVERNA”. Este mito, que es en realidad una alegoría, es una representación metafórica de la vida humana en un determinado sentido. Para saber por qué, mira el video con detenimiento!
¿Quién no recuerda el mito de la caverna?
Proyectar por primera vez las 3D (3 dimensiones) de la realidad
El cine es sólo el resultado de una evolución tecnológica ante la necesidad de la especie humana de expresarse mediante imágenes utilizando las técnicas y posibilidades de cada momento. Para ello se utilizaban los propios conocimientos, como la cámara oscura, los mitos, el folclore y la narrativa, la religión y la ficción creativa. Durante siglos, la gente quedaba maravillada por los inventos que se iban sucediendo, por la magia de las imágenes.
El interés por buscar nuevos caminos exigió la aplicación constante de la técnica y de la investigación sobre los nuevos descubrimientos, por lo que la base del cine está en el desarrollo de la ciencia y la técnica, en la que se basa y a la que le aportó muchos de sus descubrimientos.
Otra de las obsesiones era no sólo que la imagen pudiera representar el movimiento, sino también las tres dimensiones que componen una imagen real. La fotografía en tres dimensiones, nació casi con la fotografía misma. De hecho, al inventarse la fotografía en 1839, ya se sabía lo suficiente de la visión tridimensional y años después se empezaría a dar a conocer las primeras imágenes fotográficas tridimensionales.
Un factor decisivo en la propagación de la fotografía tridimensional fue cuando la reina Victoria de Inglaterra, cautivada por ellas, ordenó realizar imágenes de este tipo y avanzar en su desarrollo. Ese hecho marca el inicio de la gran popularidad que tuvo la fotografía de tres dimensiones el siglo pasado, particularmente en los países de Europa y en los Estados.
Precisamente, fue en ese país donde Charles Wheatstone inventó el primer estereoscopio. Su dispositivo empleaba espejos para mostrar dos imágenes distintas a cada ojo y así crear la ilusión de estar viendo una única imagen tridimensional. Sin embargo, unos investigadores alemanes aseguran que la primera imagen estereoscópica podría datar de mucho antes. En concreto, sería la famosa Mona Lisa, en combinación con la versión que alberga el Museo del Prado.
Primera imagen 3D de la historia
Se considera a la famosa Mona Lisa como la primera imagen realmente 3D de la historia. Este cuadro en concreto siempre se pensó que era una mera copia del original de Leonardo da Vinci, un retrato de la mujer de Francesco del Giacondo, Lisha Gherardini, pintado a comienzos del siglo XVI.
Ambos cuadros fueron ejecutados desde perspectivas ligeramente diferentes, pero lo suficientemente parecidas a la distancia entre los dos ojos como para generar un efecto estereoscópico cuando se combinan. Esto supone a la posibilidad de que las dos pinturas juntas puedan representar la primera imagen estereoscópica de la historia según un estudio publicado en Perception. De hecho, los investigadores emplearon la vieja técnica de tintar las imágenes para verlas con gafas coloreadas en azul y rojo, y pudieron ver a la Gioconda en 3D.
Sin embargo, como tecnología, el 3D se patentó en 1890 por William Friese-Greene, un fotógrafo e inventor inglés, quien creador de los primeros aparatos 3D cinematográficos en Inglaterra. Años más tarde, Frederick Eugene Ives comenzó a utilizar una cámara con dos lentes de diferente color. Este avance se considera de especial relevancia diferenciadora ya que el 3D, tal y como lo conocemos, se consigue con la superposición de dos imágenes. Otro hito del cine 3D se alcanzaría en 1922, cuando proyectó The Power of Love, la primera película en 3D que utilizaba dos proyectores simultáneos.
Actualmente, la técnica en los cines comerciales también avanza y los ingenieros cinematográficos no dejan de innovar en áreas como la imagen o el sonido. Una de las nuevas aportaciones que han hecho furor durante los últimos tiempos han sido las películas en 3D.
Los espectadores pueden apreciar dicho efecto gracias a unas gafas especiales polarizadas, muy alejadas de las antiguas anaglíficas de colores. Y como no podía ser de otro modo, la comercialización de las películas 3D en el sector doméstico tampoco ha tardado en producirse, para lo cual se ha requerido un nuevo salto tecnológico en televisores pero también proyectores 3D, unos dispositivos cada vez más habituales en los hogares.
¿Qué será lo próximo en llegar?
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